MemorialCare - Your Guide to Postpartum and Newborn Care (Spanish)

LA ESTIMULACIÓN EXCESIVA Síntomas de estimulación excesiva • La piel se enrojece o se torna pálida. • La respiración comienza a ser irregular o el bebé tiene hipo. • El bebé hace movimientos abruptos o sus brazos y piernas tiemblan. • Pasa de estar bien despierto a un estado de letargo. • El bebé mira hacia otro lado o no sostiene tu mirada. • El bebé se enoja, llora o se duerme para escapar a los estímulos. Cómo reconfortar a un bebé excesivamente estimulado • Tócalo de una manera calma y que transmita confianza. • Habla en voz baja y usa sonidos repetitivos o melódicos. • Llévalo a una habitación que esté en silencio y en penumbras. • Envuelve a tu bebé o colócalo en contacto piel con piel. • Sostenle las manos juntas al nivel de su pecho. • Acúnalo en brazos o en un canguro.

LOS CÓLICOS Los bebés con cólicos tienen periodos de llanto o molestia frecuentes, largos e intensos, pero por lo demás, están bien alimentados y sanos. El cólico puede ser muy frustrante y estresante para los padres, especialmente cuando no hay una razón obvia por la que el bebé esté molesto. Y no parece haber forma de reconfortarlo. Lo que es peor, los episodios de cólicos por lo general suceden en las últimas horas de la tarde o a la noche, cuando los padres están cansados y necesitan dormir. Los expertos no saben exactamente a qué se deben los cólicos. Pero por lo general hay más episodios de cólicos cuando el bebé tiene alrededor de 6 semanas y comienzan a disminuir cuando llega a los 3 o 4 meses. Puede haber ocasiones en que nada de lo que hagas hará que deje de llorar. Esto es normal. Si las necesidades básicas del bebé están satisfechas: pañal limpio, alimento, balanceo suave, etc., entonces prueba estos consejos: • Respira hondo y cuenta hasta 10. • Coloca al bebé en su cuna y ve a otra habitación. • Pide a un amigo o a un miembro de la familia que se ocupe por un rato.

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