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Los bebés prematuros tardíos

Primeros pasos con el bebé

Los bebés que nacen entre 3 y 6 semanas antes de la fecha de parto se denominan prematuros tardíos. Pueden aparentar haber llegado al término completo, pero necesitarán alguna atención adicional, como tomas de temperatura y de los signos vitales con más frecuencia. Aún si es prematuro tardío, su bebé podrá permanecer en la habitación con usted.

Los bebés prematuros tardíos se enfrían con facilidad y usan mucha de su energía con el solo fin de mantenerse abrigados. Esto se debe a que su bebé no tuvo tiempo de desarrollar una cantidad suficiente de grasa corporal para mantenerse templado. Vista a su bebé con una capa más de ropa que las que lleva usted. No lo vista en exceso ni permita que suba mucho su temperatura. El contacto piel con piel puede ayudar mucho para subir su temperatura. Por lo tanto, mantenga a su bebé en contacto piel con piel con una manta sobre la espalda siempre que pueda. Los bebés prematuros tardíos corren un riesgo mayor de tener problemas respiratorios. Sus pulmones aún no están completamente desarrollados y, por lo tanto, deben trabajar más para respirar. Estos bebés pueden desarrollar infecciones con más facilidad porque sus sistemas inmunitarios no han terminado de madurar. Los bebés prematuros tardíos tienen un riesgo mayor de padecer ictericia. Si su bebé no se está alimentando bien, el riesgo es aún más elevado. Se le realizarán pruebas para evaluar si tiene ictericia antes de dejar el hospital. El proveedor de atención médica de su bebé lo revisará 1 o 2 días después del alta hospitalaria. Todos los bebés necesitan alimentarse al menos 8 o más veces en 24 horas. Alimente a su bebé cuando muestre señales de que necesita comer y al menos cada 3 horas. Algunos bebés prematuros tardíos se alimentan bien, mientras que otros no. Puede ser que su bebé no se despierte para alimentarse o que no le dé señales de que necesita hacerlo. Quizás deba despertarlo para alimentarlo. Además, es probable que su bebé sienta sueño mientras se alimenta y se duerma antes de recibir la suficiente cantidad de leche. Debe mantenerlo despierto, frotarle la espalda y las plantas de los pies, y debe intentar escuchar el ruido que hace al tragar y hacer un seguimiento de los pañales mojados y sucios. Quizás su bebé no succione con fuerza, lo que también le dificulta recibir la suficiente cantidad de leche. Trate de masajear suavemente su seno mientras lo alimenta: esto ayuda a que la leche fluya y hace más fácil que el bebé reciba la cantidad que necesita. Puede usar el masaje cada vez que lo alimente. Sin embargo, también es posible que necesite extraer leche con un sacaleches cada vez que termina de alimentarlo para mantener un buen suministro de leche. Trabaje con una especialista en lactancia para elaborar el mejor plan de alimentación para usted y su bebé.

La temperatura

La respiración y las infecciones

La ictericia

La alimentación

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Capítulo 7: Primeros pasos con el bebé