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Los cambios físicos y emocionales que se esperan al regresar a casa

El alta materna

Su cuerpo necesita tiempo para recuperarse. Preste atención a cómo se siente. Si algo no parece estar bien, probablemente no lo esté. No se concentre tanto en el cuidado de su bebé de modo que ignore su propia salud.

LA INCISIÓN DE LA CESÁREA

Llame a su proveedor de atención médica si:

• Duele más. • Supura. • Tiene mal olor.

• Se comienza a abrir. • Se siente tibia al tacto. • Se hincha más.

QUÉ HACER:

• Mantenga la herida limpia y seca. • Permita que se seque al aire todo lo posible. • Use ropa holgada que no roce la incisión. • Revísela todos los días frente al espejo para detectar signos de infección. • Siga las instrucciones sobre el uso de los apósitos.

QUÉ NO HACER:

Sus loquios deben seguir disminuyendo y tornarse rosado o blanco amarillento. Es probable que desaparezcan después de 2 o 3 semanas. Siga usando toallas sanitarias, enjuague con la botella para limpiar el perineo cada vez que use el baño hasta que se detenga el sangrado. Limpie con palmaditas suaves de adelante hacia atrás y lávese las manos con frecuencia.

• Raspar la incisión si se usó adhesivo quirúrgico. • Rascar la incisión si le pica.

Hasta que su proveedor de atención médica lo apruebe:

• no use

• no nade; • no se introduzca en un jacuzzi; • no se dé baños de inmersión; • no use tapones;

supositorios vaginales; • no use duchas vaginales; • no mantenga

relaciones sexuales.

AVÍSELE a su proveedor de atención médica si:

• Empapa más de 1 toalla sanitaria en una hora. • Sangra en abundancia sin ningún motivo aparente. • Comienza a despedir coágulos otra vez. • Sus loquios son rojo brillante. • Tiene señales de PMAD. • Tiene cualquiera de las señales de advertencia posparto.

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Capítulo 4: El alta materna